60. ¡Sobrino!

Dos Años Después.

No habíamos sabido más de lo que había pasado, con la amiga de Andrea, nadie quiso volver a mencionarlo, la policía no volvió a buscarnos, la familia de aquella chica se fue del país y el caso se había enfriado, nadie pudo averiguar lo que le paso a esa adolescente, muchos decían que era obra del demonio, otros que fue utilizada en alguna secta satánica; pero nunca más lo volvimos a mencionar, aquello había quedado atrás, en el pasado.

- Sol, Apúrate. – se escucho desde la planta de debajo de la casa.

- Ya voy. – Grite.

Baje las escaleras a toda prisa, Paul estaba allí, esperándome.

- Vamos… - Pauso. – Ya está teniendo al bebé.

- ¿Debo Creerte? – Pregunte.

- No es broma, Darwim la está atendiendo. – Respondió.

¡Qué emoción! Anny ya estaba teniendo a su bebé, Todos esperábamos que fuera niña, menos Darwim, el quería un niño.

Entramos a la casa, y los gritos de Anny se escuchaban por todo el Lugar, observe a Andrea con cara de Traumatizada, tirada en el suelo, mientras que Axel se las ingeniaba para completar un rompecabezas, ¡Que niño! Pensé.

- ¿Necesitamos a otro bebé aparte de ti? – Dije acercándome a Axel, Andrea Rio a carcajadas, al igual que Paul.

- Muy graciosa, Sol, deberías ser comediante. – respondí Axel con una sonrisa muy sarcástica.

- ¿Cuánto tiempo lleva así? – Pregunte a Andrea mientras me sentaba en un sillón.

- No lo sé, creo que una hora… ¿No la escuchaban desde la otra casa? – Pregunto.

- Estábamos Algo… Ocupados. – Dije y me tape los ojos.

Andrea me miro con incredulidad y se tapo las orejas para tratar de evitar que el sonido de los gritos de Anny penetrara más a su cabeza.

Paul se sentó a mi lado y me tomo la mano.

- ¿Te imaginas...? – Lo Interrumpí.

- No lo digas. – Reí.

- ¿Por qué no? – Pregunto.

- No me siento capaz. – Pause. – No Aun.

Axel nos miro, como un niño autista tratando de decir que nos calláramos, Paul le dio un golpe en la cabeza.

- Andrea ¿Qué le diste a Axel hace dos Años que se comporta como un mismo Tonto? – Le dijo Paul bromeando a su hermana.

- Creo que no disfruto su infancia, y ahora trata de hacerlo. – Respondió Andrea Riendo.

- ¿Amor por qué no les dices la Verdad? – Dijo Axel mirando a Andrea Con picardía.

- Axel. – Grito Andrea y se tapo la cara.

De repente los gritos cesaron y se escucho un llanto, el bebé había nacido.

- Paul… - Pause. – Aun no entiendo bien como Anny salió embarazada.

- Bueno tu sabes que cuando un hombre y una mujer… - Lo mire con mediocridad.

- Yo sé eso Amor, pero… ¿El niño o niña… será vampiro? – Pregunte.

- No, nacerá humano. – Dijo y me enredo.

En eso Darwim Bajo las escaleras con el bebé en brazos.

- Este es el primogénito. – Dijo con Orgullo. – Es un Niño.

Me acerque a Paul y susurre en su oído “Luego me explicas”.

Todos nos acercamos al niño, era hermoso, blanco como la nieve, tenía los ojos color miel, y estaba demasiado desarrollado para ser un niño recién nacido, tal vez porque había pasado mucho más tiempo que un niño normal en el vientre de su madre, once meses exactos.

Andrea subió a ver a su hermana y los demás nos quedamos contemplando al hermoso bebé.

- ¿Lo Puedo Cargar? – Dije.

- Claro. – Pauso. – Tómalo.

Lo mire asombrada, y le hacía caras, me sorprendió mucho cuando me dirigió una sonrisa, no se parecía a ninguno de los padres, bueno, en el color de piel y de los ojos sí, pero en su rostro… no mucho.

- ¿Cómo lo llamaran? – Pregunte subiendo la mirada para ver a Darwim.

- Cesar. – Dijo con orgullo, Darwim estaba maravillado con su hijo.

Después de unos meses de haberse casado con Anny, resulto ese regalito hermoso que yo tenía en mis brazos.

- Bueno es hermoso tu hijo te felicito. – Le dije.